Día Mundial del Ahorro de Energía: un compromiso necesario para construir un futuro más eficiente
Cada 21 de octubre se celebra el Día Mundial del Ahorro de Energía, una fecha que busca recordarnos que el uso responsable de los recursos no solo depende de las políticas globales, sino también de las decisiones que tomamos en nuestro día a día.
En un contexto de crisis climática, energética y económica, ahorrar energía es una de las acciones más efectivas y tangibles para reducir emisiones, proteger el planeta y mejorar nuestra calidad de vida.
¿Por qué es tan importante el ahorro de energía?
La energía mueve el mundo, pero también es una de las principales fuentes de impacto ambiental. Según la Agencia Internacional de la Energía, los edificios son responsables de casi el 40 % del consumo energético mundial y de alrededor del 30 % de las emisiones de gases de efecto invernadero.
Esto significa que cada mejora en la eficiencia de un edificio, desde el aislamiento térmico hasta la gestión de sus sistemas de climatización, puede marcar una diferencia significativa en el camino hacia la neutralidad climática.
El ahorro de energía no se trata únicamente de consumir menos, sino de consumir mejor: utilizar tecnologías más eficientes, aprovechar fuentes renovables y fomentar hábitos que reduzcan la demanda energética sin sacrificar el confort ni la productividad.
Además, la eficiencia energética está directamente vinculada a la seguridad energética y a la competitividad económica. Reducir la dependencia de combustibles fósiles permite estabilizar los costes operativos, mejorar la resiliencia ante crisis energéticas y aumentar el valor de los activos inmobiliarios.
De la concienciación a la acción
Celebrar este día implica pasar de la reflexión a la acción. Gobiernos, empresas y ciudadanos tenemos la responsabilidad de impulsar un modelo energético más sostenible, donde la eficiencia sea el eje central.
La Unión Europea avanza en esta dirección a través de políticas como la Directiva de Eficiencia Energética (2023/1791), que fija objetivos ambiciosos de reducción de consumo, o la Directiva sobre el rendimiento energético de los edificios (EPBD), que promueve edificaciones con emisiones casi nulas.
Estas normativas, junto con el marco de la CSRD y la Taxonomía Europea, obligan a las organizaciones a medir, reportar y mejorar su desempeño energético y ambiental.
Cómo impulsa Ineria Management el ahorro de energía
En Ineria Management trabajamos para que el ahorro de energía sea un pilar estratégico en el desarrollo y gestión de activos inmobiliarios e infraestructuras. Nuestro equipo acompaña a clientes en cada etapa del ciclo de vida de los proyectos, ayudándoles a:
- Identificar oportunidades de mejora energética mediante auditorías y diagnósticos especializados.
- Aplicar medidas de eficiencia en climatización, iluminación, envolventes y sistemas de control.
- Implementar certificaciones ambientales como LEED, BREEAM o VERDE, que garantizan una gestión energética responsable y verificada.
- Integrar la energía en la estrategia ESG, conectando los resultados técnicos con los objetivos corporativos de sostenibilidad y descarbonización.
- Cumplir con marcos regulatorios europeos, asegurando la trazabilidad y la transparencia de los resultados energéticos reportados.
Gracias a esta visión integral, ayudamos a promotores, propietarios y fondos de inversión a reducir su consumo energético, minimizar costes y mejorar el valor ambiental de sus activos.
Un futuro donde cada acción cuenta
El Día Mundial del Ahorro de Energía nos recuerda que la eficiencia no es una meta lejana, sino una práctica diaria que transforma nuestro entorno.
Desde Ineria Management reafirmamos nuestro compromiso con un futuro en el que cada edificio, infraestructura o proceso sea parte activa de la transición energética.
Porque cada kilovatio ahorrado hoy es una inversión en el bienestar de mañana.
